Los emprendedores estamos en contra de alargar la edad de la jubilación de los 65 a los 67 años, tal y como propugnan los políticos. Y lo hacemos porque creemos que a los 65 años ya se ha trabajado mucho y es momento de jubilarse, de vivir de ahorros y posibles rentas, o por lo menos de vivir de lo cotizado, o sea de la pensión. Ahora nos dicen que no hay dinero para pagar las pensiones de aquí unos años, y resulta que solo encuentran la solución de alargar la edad de jubilación. Hay otras opciones como la de reducir y eliminar otros costes con importantes partidas monetarias en los presupuestos generales para de esta manera salvaguardar el premio que todo individuo y trabajador tiene por llegar a los 65 años después de mucho cotizar.
Entendemos que el Estado tiene que ser más eficiente. Cuando llegamos a la edad de los 65 años, y ponte que llegas este mismo año a modo de ejemplo, lo que quieres es vivir literalmente de rentas. Es decir, que hagas lo que hagas no quieres estar pendiente de conseguir una nómina, de ser eficiente para que no te despidan, o si eres emprendedor, de tener que sacar adelante el proyecto de forma rentable. Lo que te apetece porque así nos lo ha inculcado este sistema es simple y llanamente no tener que generar productividad con formato laboral, o sea, no trabajar. Podrás mantenerte en activo, podrás colaborar con otros proyectos de forma desinteresada, altruista, pero con el bolsillo ya cubierto pase lo que pase.
Ahora, los gobernantes nos quieren cambiar ese premio de todos. Y la sociedad no reacciona. Estamos escandalizados por huelgas sectoriales como la de los controladores, los estibadores, o los agricultores. Pero ahora que nos quieren cambiar las reglas de juego con algo tan importante como la jubilación, no somos capaces de reaccionar. Tendríamos que aprender de la sociedad francesa, mucho más revolucionaria y sensible a los logros sociales.
La medida de extender la jubilación nos hará más pobres como país. Puede que económicamente no, pero si socialmente.
Imagina que este año 2011 es cuando te hubiera tocado. Pues en lugar de mirar las páginas de la aerolíneas de low cost para ir a recorrer el país por 20€, te dicen que tienes que trabajar todavía dos años más. Pues no lo es mismo. Es mejor estar ahora en las Canarias y conociendo y empapándote de cultura que estar trabajando y hacer más de lo mismo. NO ES LO MISMO.
¿Y qué podemos hacer? Los emprendedores lo tenemos un poco mejor, porque por lo menos ya vivimos como queremos vivir. Cuando llegue la edad de los 65 años, muchos se retirarán y podrán vivir de las rentas de sus proyectos. Otros continuarán pero por decisión y amor propio.
Y los políticos mientras nos presentan la decisión como la única posible. La feroz amenaza de los mercados de capitales los ha cegado y han capitulado. Ya hemos dicho muchas veces que no fueron los primeros de la clase. Y encima no tienen la valentía de reflexionar y analizar con detalle las distintas alternativas posibles. Por ejemplo, reducir el Estado de todo aquello que no es vital para el desarrollo y bienestar de la población. Hay infinidad de actividades que no llegan al ciudadano y se quedan en la Administración.
Otra via es el acto mismo de gobernar. Sólo eliminando duplicidades de las distintas administraciones públicas sería suficiente para no tener que tocar la edad de jubilación. ¿Por qué no lo hacen? Ellos sabrán!