Yo en principio pensaba que no!. Era de los que solamente daba crédito a la formación académica, hasta que tuve una interesante conversación con una persona que me hizo ver que hay otras cualidades humanas tan valiosas como los estudios. Se trata de las habilidades personales y que si son bien utilizadas, pueden reportar tantos beneficios como cualquier master o postgraduado escolar. Se trata de aptitudes artesanales que complementan la sociedad capitalista de hoy, mandada y liderada por los guapos de las escuelas de negocio y Universidades.
Siempre he pensado que los estudios era la mejor y única puerta de entrada a nuestro sistema profesional y laboral. Y así lo hemos manifestado. Pero cuando uno reflexiona sobre circunstancias de gente que sin tener estudios se gana la vida tan bien o mejor que otros, salen a flote variables como la envidia y los celos de porqué esa persona está tan bien remunerada sin tener preparación alguna. Y he ahí el fallo de dicha reflexión ya que está en origen menospreciada y desvalorada. Esas personas puede que no tengan estudios pero si tienen otras cualidades humanas que los hace merecer de dichas compensaciones por su trabajo.
Se trata de los artesanos que especializados en determinadas tareas, son capaces de conseguir altos grados de profesionalidad y merecedores de altas cuantías monetarias por su trabajo. Aquí encontramos los carpinteros, los yeseros, los pescadores y todos aquellos que emplean su talento personal en una labor concreta y de alta cualificación.
En otro segmento tenemos a los deportistas. En su mayoría no tienen ni los Estudios de Secundaria (ESO), pero ahí los tienes, ganando en un año lo que un universitario puede generar en toda una vida. Su talento es la magia en hacer vibrar a miles de personas con su habilidad de pies o manos.
Y también encontramos a los que se benefician de algún que otro convenio firmado y que les genera enormes plusvalías. Por ejemplo los controladores aéreos que ganan más de 240.000 euros, los pilotos asociados en el sindicato SEPLA, o los estibadores, con sueldos de 10.000 euros/mes por llevar la logística de carga y descarga en los buques de los puertos. Todos ellos se merecen estos sueldos porque en su día lucharon y pelearon por sus derechos.
No hay que desear que todos estos colectivos ganen menos, sino aplaudirles por lo que se llevan y hacer que cada día más haya más emprendedores y más colectivos dispuestos a luchar por una situación mejor. Para que se lo lleve una multinacional, que se lo queden quien arriesga y pelea por una vida mejor.
Así que desterremos el tópico que sin formación no se puede ganar mucho dinero. En nuestro escenario de actuación profesional, hay cabida para aquellos que son despiertos, hábiles, espabilados y emprendedores, y no necesariamente son los más listos de la clase.