Los que han visitado la ciudad de Barcelona habrán quedado prendados de un servicio de transporte público que está haciendo furor entre los barceloneses. Es el Bicing y es el alquiler de bicicletas por un tiempo que no puede pasar las 2 horas. La ventaja es que la puedes alquilar en un punto de la ciudad e irte a la otra punta sin preocuparte donde la dejarás porque encuentras nuevamente un punto de entrega de la bicicleta.
El servicio ha desbordado las espectativas de los responsables municipales. Están operativas 400 estaciones y unas 6.000 bicicletas, lo que ya ha atraído a más de 155.000 abonados.
Pero el servicio tiene pegas o simplemente se podría mejorar. Una opción es esperar a que los gestores del Ayuntamiento de Barcelona decidan ir incorporando estas mejoras. La otra es aprovecharse del boom y empezar servicios complementarios. Por ejemplo:
– Un Bicing Plus que constaría de bicicletas eléctricas.
Las variables principales serían las estaciones de aparcamiento. Se podría llegar a un acuerdo con los parkings de la ciudad para instalar allí una central informática al estilo del Bicing. Es cuestión de ponerse y sacarlo adelante. También se le podría plantear al Ayuntamiento el hacerlo conjuntamente.
O pensar en servicios que el actual Bicing está afectando como puede ser el transporte público y el privado tradicional (coche). A esto le dedicaremos un artículo el próximo 8 de Setiembre. Todo esto se puede aplicar a otras iniciativas de éxito. Mirar que servicios complementarios se pueden incorporar.
¿Quién lo quiere impulsar?