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Ya no hay ninguna duda: el plato de ducha ha ganado la batalla a la bañera y su presencia en las reformas de baños es cada vez mayor.
Aunque la bañera lleva mucho tiempo formando parte de la vida de los seres humanos, la practicidad del plato de ducha ha provocado que cada vez sean más las personas que prescinden de la bañera.
Además, este accesorio para el baño resulta más útil a la hora de prevenir caídas y lesiones, lo que también ha incrementado su demanda.
El baño, la estancia que se transforma con mayor frecuencia
Hoy por hoy, el 41 % de los españoles tiene previsto hacer mejoras en su vivienda durante la segunda mitad del año, según datos extraídos del Informe sobre el Sector de la Reforma de Habitissimo.
Tras la cocina, el baño se convierte en la estancia que se transforma con una mayor frecuencia debido, sobre todo, al desgaste causado por la humedad y a las necesidades que van surgiendo en la vida de las familias.
Si nos centramos en las tendencias en muebles y accesorios para el baño, vemos que, en la actualidad, el 90 % de las reformas de baños apuestan por el plato de ducha y dejan atrás la bañera, según datos proporcionados por la empresa SecuriBath, especialista en el sector.
Tal como ha indicado Jose María Serrano, director técnico de SecuriBath, “tradicionalmente hemos visto que las edades de los convivientes han marcado la elección de bañera o ducha.
Las familias con hijos pequeños preferían tener una bañera porque les era más cómodo, pero cuando había una persona de tercera edad en la casa se decantaban por plato de ducha para una mayor seguridad y evitar posibles caídas.
Sin embargo, esto está cambiando y el plato de ducha se está imponiendo en todos los hogares. Incluso donde hay una bañera, si hay espacio, también hay un plato de ducha”.
No hay que olvidar que la mitad de las personas mayores sufren accidentes en el baño y que muchos de ellos se podrían prevenir cambiando la bañera por un plato de ducha.
Jose María Serrano lo ha explicado dejando de manifiesto que “los hijos están muy preocupados por evitar accidentes domésticos y ven el baño como un lugar de riesgo, en concreto la bañera.
Cuando la movilidad es reducida, el salto para entrar a la bañera se convierte en un momento complicado y con mucho riesgo”.
Plato de ducha y grifería nueva
Las reformas de baños actuales no solo optan por sustituir la bañera por el plato de ducha, sino también por cambiar otros elementos.
De hecho, siete de cada diez sustituciones de bañera por ducha se aprovechan para cambiar la grifería, tal como indican los expertos de SecuriBath.
Sobre este aspecto, Serrano señala que “aunque en principio rara vez es una prioridad, la grifería aporta confort y equilibrio a la decoración del baño. Esto hace que finalmente se incluya su cambio en la mayoría de reformas.
Además, ahora encontramos piezas muy funcionales y sostenibles que facilitan el ahorro de agua y energía”.
No hay que olvidar que en un baño entran en juego infinidad de elementos y que elegirlos a conciencia es clave para potenciar el confort y la comodidad.