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2021 casi ha terminado y, en estos momentos, los autónomos ya tienen el foco puesto en el próximo año con la finalidad de poder cosechar nuevos triunfos a lo largo de 2022.
En el Diario de Emprendedores queremos conseguir que los autónomos no pierdan de vista su objetivo en 2022.
Por esta razón, hemos recopilado una serie de consejos que podrán ser de utilidad para los autónomos y emprendedores que se hayan propuesto alcanzar importantes éxitos durante los próximos meses.
Recomendaciones para los autónomos que se proponen triunfar en 2022
La pandemia de COVID-19 ha impulsado la digitalización en muchos ámbitos y, en la actualidad, cada vez son más los clientes y proveedores que realizan sus gestiones de manera telemática.
No obstante, 2022 no solo servirá para consolidar aún más los procesos digitales, sino también para introducir novedades que ningún autónomo debería perderse.
Si te interesa descubrir cuáles son, presta atención a las recomendaciones que nos proponen los expertos de Quipu, un software de facturación en línea que trabaja para solucionar tareas administrativas diarias:
Luchar contra el fraude fiscal
El pasado 11 de octubre entró en vigor la nueva Ley Antifraude, destinada a luchar contra los fraudes fiscales prohibiendo la utilización de softwares que permitan manipular y falsear la contabilidad de la empresa.
Esta ley implica que todos los autónomos y emprendedores tienen la obligación de emplear programas informáticos que estén ubicados en la nube y garanticen la veracidad e integridad de la información.
En palabras de Roger Dobaño, CEO de Quipu, “deberemos demostrar que nuestro software cumple con la normativa. De momento funciona todo de forma reactiva: al no haber unos requisitos mínimos, especificaciones técnicas u homologaciones, debemos estar siempre al día para no volvernos locos en el caso de que Hacienda nos contacte.
Los programas creados en la nube como el nuestro están mejor preparados para la modificación de esta ley, ya que facilitan la accesibilidad y la trazabilidad”.
Digitalización de facturas y procesos
En este listado de consejos para que los autónomos no pierdan de vista su objetivo en 2022 también es importante destacar la relevancia de la digitalización de facturas y procesos, que crece día tras día y ayuda a ahorrar muchísimo tiempo.
Roger Dobaño la explica dejando de manifiesto que “ya estamos en la antesala de la digitalización, y no únicamente porque las empresas y autónomos quieran, sino porque la ley obliga en muchos casos. Ahora toca renovarse o morir.
Es el momento de prepararse e implantar todo lo que vaya requiriendo la administración antes de que sea demasiado tare y comiencen los problemas”.
Cambios en las cuotas de los autónomos
Las personas que trabajan por cuenta propia tienen la obligación de abonar mes a mes una cuota que a lo largo de 2022 se incrementará en la base mínima y máxima de cotización en un 1,7 %.
Tal como ha indicado Dobaño, “tras el aumento progresivo durante varios años, los tipos de cotización aplicados a las bases serán: 28,30 % para las contingencias comunes, 1,30 % por contingencias profesionales, 0,10 % por formación profesional y 0,90 % por cese de actividad.
Es decir, para quienes coticen por la base mínima su nueva cuota mensual en 2022 ascenderá a 293,94 euros; para la base máxima serán 1.266,66 euros y para los autónomos societarios pasará a ser de 377,87 euros”.
La cotización por ingresos reales se aplaza hasta 2023
A pesar de que la cotización por ingresos reales iba a entrar en vigor este 2022, finalmente se aplazará hasta 2023, aunque el incremento del 3 % de las pensiones mínimas sí seguirá adelante.
¿Las consecuencias? Roger Dobaño las explica a la perfección: “teniendo en cuenta estos factores se darán casos en los que el trabajador cobre más o menos que lo que le corresponde por su cotización.
Esto significa que un autónomo con la base máxima puede percibir menos pensión de lo que debería y un con la base mínima puede tener una jubilación más alta que la esperada”.
Recuerda que con Quipu tendrás la oportunidad de presentar los modelos tributarios sin contacto físico.