Soy Alex Rodríguez, tengo 34 años, nací en Zaragoza, pero hace tanto tiempo que vivo en Lleida que me siento más leridano que mañico. Tengo dos hijos, y un reto por delante: emprender mi propia empresa de desarrollo de aplicaciones móviles.
Mi formación es sobretodo informática, aunque también poseo un master en administración y dirección de empresas, y he hecho mis pinitos co-fundando empresas, pero no fue hasta hace un año que decidí que tenía que montar una empresa de aplicaciones para móviles.
Por aquel entonces, cayó en mis manos un smartphone, lo comencé a trastear y ví que era relativamente sencillo hacer apps, así que me lié la manta a la cabeza, me compré un portatil de segunda mano en eBay para programar, y dejé la empresa donde trabajaba para hacer mis propias aplicaciones.
La primera de estas apps es casualJobs, el primer directorio de profesionales para smartphones.
1.- ¿Qué te llamó la atención de ser emprendedor? ¿Naciste o te hiciste emprendedor?
Cuando lo veía desde la barrera, me gustaba mucho ver a emprendedores que habían sido capaces de transformar su idea en realidad, eso me llamaba mucho la atención y provocaba mi admiración. Ahora, desde el otro lado, veo que el camino no es fácil, ni mucho menos, pero sigue teniendo esa esencia de autorealización que tanto me fascina.
Debo decir que en mi caso, no llevaba el espíritu emprendedor dentro, supongo que en parte porque no lo he vivido en casa, pero me he intentado formar en este aspecto, y creo que al final podré llamarme a mi mismo»emprendedor»
2.- ¿Viven mejor los emprendedores?
Si hablamos en términos de realización profesional, yo creo que sí. En otros ámbitos, por ejemplo, el familiar, no tanto. Cuando quieres que tu idea triunfe haces todo lo posible por perfeccionarla, es como una obsesión, y al final le dedicas más tiempo del que quisieras. Eso tiene un impacto en tu vida social, evidentemente. Aún así, creo que compensa, y que no toda la vida estaré en este nivel de exigencia. Ya se sabe, todos los comienzos son difíciles.
3.- ¿Tuviste excusas para no emprender antes?
Lo hubiera hecho antes si hubiese encontrado una idea antes. Lógicamente, dejar un empleo estable era un handicap a la hora de emprender, pero tuve mucho apoyo por parte de mi familia. En su momento valoré que es lo que necesitaba: realizarme como profesional o tener un sueldo a final de mes, y en mi caso la respuesta fue muy clara.
4.- ¿Qué es lo que más valoras de tu nueva vida como emprendedor?
Para mí, poder dedicarte a lo que te gusta y tomar las decisiones de más alto nivel es algo que no se paga con dinero. Es un cambio muy grande respecto a trabajar tus horas en una oficina, con una serie de tareas programadas por otro. La contrapartida es que tener que decidir todos los temas puede llegar a ser extenuante.
5.- ¿Qué le recomendarías a alguien que se está pensando el empezar a emprender?
En un país donde la máxima aspiración de mucha gente es llegar a ocupar una plaza de funcionario, a veces el entorno no es el más propicio para emprender. Recomendaría que si alguien se quiere lanzar a la aventura, que se informe y se asesore bien. Existen muchísimos organismos públicos que van a ayudarle a llevar a cabo su idea, y gratis. Así que ese es mi consejo, que vayan a una cámara de comercio, por ejemplo, que le ayudarán con su idea.