Índice
El envío y recepción de mensajes de WhatsApp está cada vez más presente en la vida de los españoles.
Tanto es así que el VII Estudio Anual de Mobile Marketing ha dejado de manifiesto que un total de 15,4 millones de personas en nuestro país utilizan smartphone y que el 75 % de ellas tienen instalada la aplicación de mensajería instantánea WhatsApp.
Este hecho ha provocado que los mensajes de WhatsApp hayan empezado a presentarse como pruebas en los juicios, aunque el ingeniero y perito informático Javier Rubio, del Colegio de Ingenieros en Informática de Madrid, ha demostrado que los mensajes de esta famosa aplicación pueden manipularse con facilidad.
Los mensajes de WhatsApp pueden manipularse y pasar por auténticos
El ingeniero Javier Rubio asegura que “los mensajes alterados pueden pasar perfectamente por auténticos y que ni siquiera un examen forense realizado por un perito informático podría certificar que no han sufrido manipulación”.
Así lo ha demostrado a través de un artículo técnico que verifica que los mensajes recibidos en un smartphone Wiko Goa en el que está instalado WhatsApp (enviados desde un Samsung Galaxy S6) pueden ser manipulados de un modo relativamente sencillo y sin dejar ningún rastro alterando directamente la base de datos en la que se almacenan.
Una noticia que ha cambiado mucho las cosas debido a que “la posibilidad de que los mensajes puedan ser manipulados de forma tan sencilla genera una inseguridad muy alta cuando se presentan mensajes intercambiados mediante esta aplicación como prueba en procedimientos judiciales”, como ha manifestado el perito informático Javier Rubio.
El ingeniero continúa asegurando, con respecto a los procesos judiciales en los que se presentan mensajes de WhatsApp, que “la aceptación de conversaciones de WhatsApp como prueba en un juicio debe realizarse con muchísima cautela y siempre avalada por el informe de un perito informático, tal y como obliga la jurisprudencia en la Sentencia del Tribunal Supremo número 2047/2015, de diecinueve de mayo”.