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El marketing digital ha evolucionado de una forma exponencial durante los últimos años y ha dado pie a nuevas fórmulas promocionales.
Sin embargo, al mismo tiempo se han perfeccionado algunas de sus ramas más tradicionales. El email marketing continúa siendo uno de los recursos más efectivos y empleados por todo tipo de marcas y medios.
Su capacidad para generar contenidos altamente personalizados de forma masiva y al mismo tiempo medible y controlada supone grandes oportunidades para todo tipo de modelos de negocio.
Pero, ¿cómo explotar sus potencialidades? A continuación compartimos contigo cuatro consejos que te ayudarán a incrementar el rendimiento de tus campañas:
El diseño y la accesibilidad: piezas clave
El diseño se convierte en un factor que determina la efectividad de una campaña de email marketing. La usabilidad y la funcionalidad ganan peso y definen la experiencia del usuario.
Cuidar el diseño web de nuestros correos puede resultar algo complejo para aquellas personas que no están familiarizadas con lenguajes como HTML5 o CSS3.
Sin embargo, esto no supone ningún tipo de obstáculo en la planificación de campañas eficientes gracias a la presencia de plantillas predefinidas.
Dentro de plataformas especializadas en email marketing como Mailrelay es posible acceder a un amplio abanico de diseños optimizados y categorizados por temáticas.
Gracias a su uso es posible identificar fórmulas estéticas que se adapten a las necesidades comerciales de nuestra marca.
Cuidar la legibilidad de los contenidos o la capacidad de adaptabilidad a todo tipo de dispositivos a partir de un buen diseño que además se adapte al discurso visual de nuestra marca puede ayudar a mejorar los ratios de conversión de forma significativa.
Buscar el momento adecuado
La programación de los envíos debe adaptarse a una franja horaria en la que exista una mayor predisposición a consumir contenidos.
El momento en el que nuestros usuarios reciben actualizaciones puede determinar factores tan importantes como la naturaleza de sus interacciones.
En última instancia, una campaña de email marketing está orientada a generar una respuesta específica por parte de nuestros usuarios a partir de acciones transaccionales.
Según los estudios llevados a cabo a este respecto, las 11:00 horas constituye la mejor franja horaria para lanzar campañas de email marketing, especialmente a lo largo de los primeros días de la semana.
Es entonces cuando la mayoría de usuarios destina su tiempo a revisar sus correos electrónicos para poner en orden asuntos relacionados, sobre todo, con el ámbito profesional.
Aprovechar estos periodos puede ayudarnos a incrementar nuestro ratio de aperturas en un punto en el que la interacción puede estar especialmente orientada hacia lo transaccional.
No obstante, antes de definir el momento del envío debe valorarse cuál es el objetivo de la campaña.
Si se trata de una newsletter sobre las principales actualizaciones y noticias informativas semanales, el fin de semana (sobre todo el domingo por la tarde, entre las 20:00 y las 22:00 horas) se convierte en la franja más propicia pues existe una tradicional predisposición a consumir prensa y contenidos de actualidad en dicho periodo.
La personalización de los contenidos te acercará a tu audiencia
La automatización de procesos supone grandes ventajas a nivel de gestión pero nunca debe ser visible. Enviar correos masivos despersonalizados genera una separación perjudicial con el lector y puede definir negativamente nuestra imagen como marca.
Para propiciar un clima de confianza y cercanía debe recurrirse a la personalización tanto como se pueda. Esto incluye adaptar los contenidos a las necesidades de cada usuario o incluir el nombre de cada destinatario acompañado de un saludo personal.
Para poder obtener un mayor rendimiento, es importante realizar un proceso de segmentación previo que nos permita distinguir los perfiles que componen nuestra audiencia.
A medida que definimos segmentos más específicos resulta más fácil elaborar emails personalizados.
Análisis y seguimiento: optimiza tus estrategias atendiendo a los resultados obtenidos
El diseño y planificación de campañas de email marketing requiere de una estrategia de optimización que nos ayude a perfeccionar nuestros contenidos y propuestas constantemente.
Para poder alcanzar un mayor rendimiento es necesario conocer cuál es el impacto real que nuestras acciones tienen sobre nuestras audiencias.
¿Qué grado de repercusión generan nuestros contenidos? ¿Qué tipo de interacciones se producen con nuestros correos electrónicos? ¿Qué segmentos de nuestra audiencia son más proclives a responder a nuestras llamadas a la acción? ¿Qué horarios y en qué procesos relacionales con la marca son más apropiados para estimular la adquisición de productos o servicios?
Llevar a cabo un análisis nos ayudará a identificar fortalezas, debilidades y oportunidades de mejora.