Todos sabemos que una buena formación puede abrirnos más puertas a la hora de encontrar trabajo que el hecho de no haber cursado unos estudios.
No obstante, no todo el mundo tiene la oportunidad de formarse, ya que los estudios son en ocasiones muy caros y requieren también de bastante tiempo de dedicación.
Si este es tu caso, no tienes que desanimarte, ya que existen trabajos que están muy bien remunerados y que no requieren de una titulación universitaria. ¿Quieres conocer algunos? ¡Hoy te los presentamos!
Comprobador de pozos de aceite
Estos trabajadores se encargan de comprobar si los pozos de aceite y de gas bombean de forma correcta. De no ser así, su trabajo consiste en fijarlos y arreglarlos. Es una labor algo peligrosa, pero no requiere de ningún tipo de estudio universitario y, además, está muy bien pagada.
Director de venta al por menor
Se encargan de revisar las operaciones cotidianas que tienen lugar en una tienda de venta al público, como son la supervisión de los empleados, la política de relaciones con el cliente o las promociones, entre otras cosas. No es necesario tener estudios, pero sí experiencia en el sector de las ventas.
Director de la administración de una vivienda
Estas personas trabajan en residencias privadas, hoteles, clínicas o restaurantes y su trabajo consiste en asignarles el trabajo a los empleados o realizar informes con los diferentes costes, entre otras cosas. Es un trabajo ideal para, por ejemplo, quienes han trabajado como porteros en edificios.
Operadores de grúa
Estos trabajadores se encargan de levantar y mover materiales, maquinaria y otros objetos pesados con la ayuda de una grúa. No es necesario tener ningún tipo de preparación universitaria, aunque suelen buscar a personas bastante jóvenes.
Director del servicio de alimentación
Su labor consiste en alquilar y supervisar al personal para restaurantes u otros establecimientos relacionados con la alimentación. Para este trabajo no es importante ser titulado, pero sí tener experiencia en el sector de la alimentación.
Como ves, la formación es importante, pero no fundamental, por lo que el hecho de no tener un título universitario nunca debe frenarte ni suponerte un obstáculo para emprender ese negocio soñado. Piensa que puedes tener mucha experiencia en algún sector, ¿por qué no le sacas provecho?
Piensa que la experiencia es un grado y que como realmente se aprende es trabajando. ¡Que nada te impida crear esa gran empresa en la que llevas tanto tiempo pensando!