¿Qué harías con un millón de dólares?, ¿emprenderías con ese proyecto que tienes en mente y que tanto capital necesita para ver la luz?, ¿viajarías a los parajes más bellos del mundo?, ¿acudirías a los mejores restaurantes del planeta?
Desde luego, disponer de tal fortuna nos da la oportunidad de hacer muchísimas cosas. Pero, ¿qué hay que hacer para ganar un millón de dólares?, ¿realmente existen trucos, consejos o claves que nos muestren el camino hacia la riqueza?
¡La respuesta es sí! O al menos esto es lo que piensa Marshall Brain, reconocido emprendedor, fundador de la plataforma How Stuff Works y creador de varias reglas para ganar un millón de dólares.
Algunas de ellas son divertidas y curiosas. Otras, en cambio, resultan extrañas y hasta descabelladas. Pero, al fin y al cabo, todas ellas son opciones aptas para los emprendedores que desean descubrir las claves para ganar un millón de dólares. ¿Te animas a conocerlas?
Heredar el dinero
Una de las primeras formas de ganar un millón de dólares es, según afirma Marshall Brain, heredar el capital. Una acción que, además de estar plagada de tristeza en la gran mayoría de ocasiones, no está bajo nuestro control, aunque es una opción, ¿no te parece?
Ganar la lotería
En el Diario de Emprendedores te hemos hablado, en alguna ocasión, de las ventajas que puede tener invertir unos pocos euros en un boleto de lotería. Otra vía totalmente legal y factible de ganar un millón de dólares que también aparece en la lista de las propuestas creadas por este prestigioso emprendedor.
Ahorrar 5 euros al día
Si ingresas 5 euros al día en una cuenta bancaria que te devuelva un 10 por ciento de interés cada año, en 42 años habrás conseguido hacerte con nada más y nada menos que un millón de dólares. ¡Solo un paquete de tabaco ya cuesta una media de 5 euros, por lo que merece la pena intentarlo!
Ser emprendedor
¡Ya ha llegado nuestra opción favorita! Y es que ser emprendedor también te puede dar la oportunidad de ganar un millón de dólares. En este sentido, Marshall Brain comenta que puedes obtener beneficios tanto a través de los ingresos que genere tu empresa como mediante la venta de la entidad, una opción tan válida como cualquier otra.
¡Ya no tienes excusa para no convertirte en emprendedor!