La coyuntura actual ha puesto de manifiesto que aquellos profesionales que no sean realmente buenos tienen un pie más fuera que dentro.
Hay que demostrar valía, cualidades, aportación al proyecto y sobre todo, compromiso y esfuerzo. Estos valores que podrían definirse como parte esencial en cualquier trabajador habían sido olvidados por muchos. Y pasa lo que pasa. Cuando la economía toca fondo y los ingresos de las empresas caen, la mediocridad ya no pasa tan desapercibida. De hecho, aparece con esplendor y se sabe quien vale y quien aporta en la organización. Cuando todo iba bien, esta mediocridad y falta de compromiso con el proyecto estaba totalmente escondida.
Hay que volver a ser productivos, y sobre todo en los entes públicos que es donde todavía no se ha hecho el ajuste laboral que tanto está afectando a las empresas y al sector privado.
Ponemos como ejemplo el operario que lleva esta pequeña excavadora y la tiene que cargar al camión. Uno ya no sabe si es cierto o no, si hay truco en la filmación, pero sea lo que sea, hay que apreciar el talento de esta persona con el manejo de dicho vehículo. Posiblemente antes tenía un compañero al que han despedido y se lo tiene que montar el solito. O es el que está en el bar filmando este video y riéndose de todos nosotros puesto que él no tiene ningún compromiso pero se sabe vender muy bien. Hasta que lo pillen!