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Con el comercio electrónico nuestros hábitos de consumo han cambiado por completo.
Hoy compramos de todo por internet: comida, ropa, billetes de avión… y el mundo de las subastas no ha quedado exento a esta tendencia.
Si hasta ahora participar en una de esas típicas subastas que estamos acostumbrados a ver por televisión era posible solo para unos pocos, en los últimos años han surgido alternativas que han puesto al alcance de todos la posibilidad de pujar en línea por todo tipo de artículos y sin tener que salir de casa.
Este es el caso de Catawiki, el portal de subastas on-line de artículos singulares de mayor crecimiento del mundo.
El objetivo de esta plataforma no es otro que el de democratizar el apasionante mundo de las subastas y permitir a toda aquella persona que quiera vender y comprar en subastas objetos únicos y curiosos con tan solo unos clics desde el ordenador, tablet o smartphone.
Catawiki, un portal de subastas on-line creado por los emprendedores René Schoenmakers y Marco Jansen
Al igual que muchas startups de hoy, Catawiki también cuenta con una historia emprendedora detrás. La compañía nació en Holanda en 2008 cuando sus fundadores, los emprendedores René Schoenmakers y Marco Jansen, dos apasionados de los cómics y las nuevas tecnologías, crearon un catálogo virtual para organizar su colección, permitiendo que otros coleccionistas colaborasen en la creación del portal.
En noviembre de 2011 decidieron probar y celebraron la primera subasta on-line de un juego del famoso cómic holandés Tom Poes. La subasta contó con muchísima participación y el artículo fue adjudicado finalmente por 310 euros. Vieron entonces una oportunidad clara y tras esa primera subasta llegaron muchas más.
El portal de subastas on-line Catawiki ofrece miles de artículos por los que pujar semanalmente gracias a un amplio catálogo dividido en 80 categorías, donde se pueden encontrar desde elementos arqueológicos, hasta cómics, relojes, coches clásicos, obras de arte, monedas, joyas y un sinfín de objetos por los que pujar a partir de un euro.
“Cada semana subastamos en tiempo real más de 35.000 artículos singulares en las más de 300 subastas on-line que ponemos en marcha”, comenta Alejandro Sánchez, director general de Catawiki en España.
Todos esos artículos son verificados y autentificados por expertos que se encargan de supervisar todo el desarrollo de las subastas. Al optar por cualquier artículo el pujador puede ver la descripción del objeto en cuestión y fotos y ver en tiempo real cómo se está desarrollando la subasta y si tiene cualquier duda puede hacer sus preguntas al experto encargado de la misma.
De esta forma, la última puja realizada al finalizar la subasta será la que se adjudique el artículo que recibirá por correo en su domicilio pasados unos días.
Catawiki, una plataforma de subastas on-line que permite pujar y vender
Además de pujar, en Catawiki también se puede vender. Y es que esta plataforma da la opción de que cualquier persona pueda vender a través de sus subastas aquellos objetos especiales que ya no le interesan o no usa y de los que quiere sacar un ingreso extra.
Para ello solo hay que registrarse y subir los artículos que desea poner a la venta aportando fotos y descripción de los mismos y esperar a que sean verificados por los expertos.
“Según nuestros datos, vender a través de subastas puede suponer hasta un 20 % más de ingresos que si se vendiera a través de otras plataformas más tradicionales”, asegura Sánchez.
Desde la compañía señalan que a lo largo de estos años se han podido ver cosas muy curiosas en sus subastas. Además de subastar piezas tan cotidianas como obras de arte, esculturas o relojes, también se han subastado otros tan peculiares como el primer coche de Julio Iglesias, los colmillos de un Tiranosaurio Rex, fragmentos de la Luna o un preservativo del siglo XIX.
Entre los más caros subastados hasta la fecha destacan un Porsche 365 subastado por 180.000 euros, el esqueleto de un mamut por 120.000 euros y un cómic inédito de Tintín por 40.000 euros.
Ahora, Catawiki cuenta ya con más de 500 empleados y está operando en Ámsterdam, Bélgica, Francia, Alemania, Reino Unido, Italia, España, Portugal, Grecia, Países Nórdicos y Rumanía.
Según Sánchez, “nos encontramos en una etapa importante de crecimiento en la cual nuestro objetivo es ir llegando a más países hasta convertirnos en la casa de subastas on-line de referencia a nivel global en la que personas de todo el mundo confíen para comprar y vender sus artículos”.