¿El fin de la hegemonía de Google y de los motores de búsqueda tradicionales?


En 1995, apareció el primer directorio web de la mano de Yahoo! Tan solo un año después, en 1996, este directorio prácticamente fue desbancado por AltaVista, siendo el primer motor de búsqueda en indexar las páginas web y no tardó en llegar Google que, desde su aparición en 1998, ha sido el motor de búsqueda más utilizado. Sin embargo, parece que su hegemonía puede peligrar.

“Google ha ido añadiendo mejoras con frecuencia, pero sigue pareciéndose a un directorio y su evolución puede no ser suficiente para que no sea sustituido por una nueva generación de buscadores inteligentes”, explica Isidoro López-Briones Santos, responsable de estrategias tecnológicas digitales de GOWtech, que añade que “si no saca pronto una versión completamente renovada, se quedará para simples búsquedas de cuarta categoría”.

Según afirma la tecnológica murciana dedicada a la transformación digital de las empresas, “los buscadores deben evolucionar para convertirse en consultorios, atendiendo a la necesidad de los usuarios que quieren hacer consultas no búsquedas y obtener respuestas y no un listado de páginas que visitar para buscar la información”.

Para estos expertos, ChatGPT ha mostrado el potencial de la Inteligencia Artificial (IA) y los buscadores deben evolucionar para convertirse en consultorios capaces de admitir consultas complejas en lenguaje natural, proveer respuestas directas en lugar de listados de páginas y poder interactuar sobre las respuestas para continuar completando información o afinando la búsqueda como si de una conversación se tratara.

Isidoro López-Briones Santos señala la necesidad de mejorar la experiencia del usuario, ya que se pierde mucho tiempo buscando, a la vez que destaca que “hay que facilitar el acceso de la información a quienes tienen dificultades de accesibilidad, proporcionando directamente una respuesta desde el buscador sin tener que estar navegando entre multitud de páginas”.

Según indica GOWtech, los consultorios, al detectar y clasifican el tipo de consulta (informativa, transaccional, navegación y de contenido de entretenimiento) podrán ofrecer un formato de respuesta diferente y apropiado acorde al tipo de consulta, los usuarios principalmente hacen búsquedas para adquirir cierto conocimiento o resolver las dudas y pueden ser resueltas directamente en la respuesta del buscador mediante texto, gráfico, tablas y apoyo multimedia según se requiera en lugar de un listado de páginas que ir visitando.


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