Siempre hemos presentado oportunidades para emprendedores pero hoy queremos también presentar un increíble proyecto a los ayuntamientos, tan necesitados de dinamizar la vida social y económica de sus conciudadanos. A los entes locales les falta creatividad y ganas de querer hacer cosas. Muchos de ellos no han hecho prácticamente nada nuevo en esta legislatura, con la excusa de que no hay presupuesto. Les faltaría incorporar el pensamiento y carácter emprendedor y se quedarían asombrados de la cantidad de proyectos que se pueden hacer sin dinero y con gran impacto en su ciudad. Hoy tienen la posibilidad de hacer de su municipio el referente europeo o español de la vida sana.
La idea final sería conseguir que la ciudad se convirtiese en el referente en vida sana, donde los ciudadanos fuesen los guapos, los que más y mejor viven y los que más cuidan de su entorno y medio ambiente. El cómo se consigue es el proyecto que hoy presentamos.
El origen de la idea es que cada vez más se aboga por una mejor vida, con exigencias de calidad tanto a nivel de saborearla y menos estrés, así como llena de salud y longevidad. Oiremos más a los médicos reclamando más cuidado personal (y no solamente para evitar la gripe A), a líderes de la sociedad propagando a todo viento que la salud proporciona felicidad, a los políticos repitiendo lo mismo ya que se apuntan al carro para hacer suyo el mensaje, y a los medios de comunicación que escribirán y publicarán noticias y reportajes sobre la necesidad de influir y concienciar para que tengamos todos un mejor comportamiento para con la salud propia.
Y entre tanto mensaje mediático, los equipos gubernamentales no hacen nada. Es como si no oyeran la voz emprendedora que les podría salir de dentro. Pero esto es justificable porque no tienen el chip emprendedor y no es opinión compartida por los ciudadanos que esperan de sus gobernantes mucho más. Podrían formarse y hacer que el sentimiento emprendedor floreciese en forma de ideas e iniciativas para su ciudad.
La idea es hacer de la ciudad un lugar conocido por todos por los buenos hábitos, por las buenas actitudes hacia la vida sana y por la promoción de valores que impulsan la salud humana y la calidad de vida de los ciudadanos. Por un parte se trata de posicionar a la ciudad en el mapa europeo como referente en salud ciudadana. Por otro y paralelamente, hay que articular una serie de proyectos e iniciativas que consigan incrementar dichos parámetros con cosas tangibles y reales. Todas estas acciones irían calando entre la población con la implementación del proyecto y en unos años veríamos a la ciudad entre las más visitadas, admiradas y tenidas en cuenta en este importante aspecto global del ser humano de hoy.
Entre las iniciativas, podemos destacar actividades desarrolladas por toda la población como el deporte, el buen comer, la calidad del agua y su aprovechamiento, el reciclaje, el cuidado del medio ambiente y un sinfín de ideas relacionadas. Los ciudadanos podrían participar en eventos deportivos de toda clase. En formato popular y competitivo, el deporte es siempre sinónimo de bienestar y ocupa el primer rango de las prevenciones cardiovasculares. Para todo lo demás se trata de desarrollar un catálogo de acciones y protocolos de intenciones y valores a conseguir.
La ejecución de esos proyectos es lo que irá dando forma a la idea de convertir la ciudad en el paraíso del buen vivir.
El proyecto de convertir la ciudad en el referente en calidad de vida es también un proyecto de CREAR MARCA sobre la propia ciudad. Esto le viene bien a todos los municipios por lo que conlleva. Si se consigue, cientos de congresos se realizarían en la ciudad, donde buscarían estar cerca de esa calidad de vida por todos anhelados. También habría miles de turistas ansiosos de contagiarse de ese feeling y moda de estar guapo y sano. El bienestar económico de todos los residentes está asegurado, especialmente de los más emprendedores.
Esta oportunidad municipal no tiene porque costar dinero. Se trata de utilizar los recursos humanos que ya se disponen y la creatividad emprendedora para saber articular el mensaje y proyecto. Lo han hecho ya con el Plan E del gobierno y han inundado sus localidades con grandes carteles. Ahora toca espabilarse y no depender de un segundo plan local de inversiones para dinamizar la vida social y económica de sus ciudades.